Pasé una noche increíble en un lugar acogedor. La habitación era amplia y bien equipada, y el desayuno incluía todo lo que podría desear, desde bollería fresca hasta un capuchino delicioso. Un pequeño detalle fue que el ventilador no fue suficiente para el calor, pero eso no arruinó mi experiencia. definitivamente volvería.

Ponlo en tu lista de imprescindibles

Este albergue es un auténtico tesoro. Las habitaciones son amplias y decoradas con encanto, ofreciendo vistas impresionantes a las torres. El desayuno es variado y el café, exquisito. Lo mejor es el trato excepcional del personal, siempre dispuesto a ayudar. Sin duda, ¡repetiré!

La habitación era amplia y el piso de la ducha era resbaloso.

Pasamos un fin de semana genial con amigos. La habitación era amplia y muy acogedora. El desayuno era variado e incluía todo lo que queríamos. La ubicación es perfecta para explorar, ya que visitamos la Piazza Maggiore y las famosas torres. El personal siempre fue amable y dispuesto a ayudar. Definitivamente lo recomendaría por su buena relación calidad-precio.

El baño era compartido, lo que en ocasiones significó esperar a que estuviera libre, pero se mantenía limpio todo el tiempo.

la ubicacion es top, justo enfrente de las dos torres y a un paso de la plaza mayor. el trato del personal fue genial, siempre amables y dispuestos a ayudar. la limpieza es impecable, los baños comunes estaban siempre limpios. el desyuno es sencillo pero suficiente y rico! mi habitacion era amplia y con vistas a las torres, super chido!

pero el ruido de la calle es un poco molesto y no hay aire acondicionado, solo un ventilador que no da pa más.

La atención del personal fue excepcional.

a. Ubicación central
b. Habitaciones amplias
c. Desayuno delicioso

a. Ruido exterior
b. Falta de aire acondicionado

Recomiendo para quienes buscan encanto

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar con una sonrisa y darnos recomendaciones de los mejores lugares. Recuerdo que el dueño compartió su pasión por la historia del lugar y eso hizo que nuestra estancia fuera única.

No fue barato, pero todavía fue aceptable.

La ubicación es inmejorable, justo en el

corazón de la ciudad, lo que te permite caminar a varios puntos de interés fácilmente. Las habitaciones están decoradas con un estilo encantador y la limpieza es impecable. El desayuno es sencillo pero suficiente. Sin embargo, en ocasiones el ruido de la calle puede ser molesto.

la recepcionista es super amable y siempre dispueta a ayudar. el ruido de la calle puede ser incómodo.

Las habitaciones están decoradas con un estilo encantador.

Durante mi estadía en el Albergo Garisenda, encontré que el ruido del centro era inaguantable, incluso desde el tercer piso. A pesar de disfrutar de una habitación grande con vistas, el sonido de la gente en la calle me dificultó descansar. Además, la falta de aire acondicionado hizo que las noches fueran incómodas, pues solo había un ventilador que no era suficiente para mitigar el calor.

Disfruté de una habitación amplia con vistas excelentes a las torres. Los servicios eran compartidos, pero estaban limpios. Lo mejor fue el trato del recepcionista, siempre amable y dispuesto a ayudar. Pasé un rato agradable en el bar del hotel con un buen café. Mi estancia aquí me hizo sentir muy bienvenido. Como chef, valoro mucho la atención al detalle.

La falta de aire acondicionado fue incómoda y el ruido del centro llegó a ser molesto.

Ubicación perfecta, todo a un paso y limpieza impecable. Los propietarios son un encanto, siempre allí para ayudarnos con todo lo que necesitábamos.

El ruido afuera me hizo pensar que era un bar, pero al menos no tuve que pagar por el entretenimiento.

El albergue Garisenda tiene una ubicación increíble. Desde la habitación tenía vistas a las famosas torres de Bolonia. La habitación era amplia, lo que me dio suficiente espacio para moverme cómodamente. Había un lavabo dentro, lo cual me pareció muy práctico. Los baños compartidos estaban siempre limpios y era fácil acceder a ellos sin esperar. La atención por parte del personal fue excelente, siempre con una sonrisa y dispuestos a ayudar con cualquier pregunta. El desayuno era sencillo pero completo, con bollería, cereales y un buen café. Sin embargo, hay que tener en cuenta el ruido del centro. A veces el bullicio de la calle se colaba a través de las ventanas, lo que podía resultar molesto. me quedé un poco incómodo por la falta de aire acondicionado, en especial porque hacía calor durante mi estancia. Tenía un ventilador, pero no era suficiente. Aún así, recomendaría este albergue por su cálida atención y buena ubicación.